El sistema inmune y las estaciones

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Según estudios de la Universidad de Cambridge las diferentes estaciones del año pueden provocar cambios en el sistema inmunológico, mismos que se ven influenciados por el código genético, como resultado de la adaptación a variables ambientales como la luz solar, temperatura y el tipo de alimentos que ingerimos.
Existen estudios que evidencian que el 23% del genoma humano muestra variaciones estacionales, principalmente en los glóbulos blancos (células del sistema inmune en la sangre) y en células del tejido graso (adipocitos); cerca de 4,000 genes ven afectada su expresión. Esto se traduce en un cuerpo más vulnerable a padecer enfermedades específicas en verano o invierno.
Los registros estadísticos de las instituciones de salud muestran claramente que ciertas enfermedades infecciosas tienen una mayor frecuencia durante ciertas estaciones, por ejemplo: durante primavera y verano, las enfermedades de origen viral: gastrointestinales, hepatitis A, varicela, infecciones por enterovirus; mientras que en otoño e invierno predominan la influenza, enfermedades transmitidas por vectores como el dengue y zika.
Adoptar algunas medidas para mantener nuestro sistema inmunológico saludable, fuerte y alerta para poder adaptarnos a estos cambios, es muy relevante.
A continuación te dejo una serie de recomendaciones que puedes seguir para mantenerte saludable:

  1. Consumo de alimentos ricos en Zinc y vitaminas A,C Y D; que ayudan a mejorar el sistema inmunológico
  2. Aumenta el consumo de frutas y verduras
  3. Ingesta de alimentos ricos en Omegas 3
  4. Aumentar el consumo de alimentos ricos en prebióticos (fibra) y probióticos
  5. Priorizar tener un buen descanso que le permita al cuerpo regenerarse y mantener el equilibrio
  6. ¡Muévete! El ejercicio estimula las funciones del sistema inmunológico y mantiene en equilibrio tu metabolismo
  7. Agradece, la práctica intencionada y programada de la gratitud prende el switch de tu salud
  8. No olvides cuidar de tus relaciones personales, contar con una red de apoyo puede resultar muy benéfico para tu cuerpo
  9. Aprende herramientas de transformación del estrés, recuerda que el estrés crónico puede ser el detonante de desequilibrio y enfermedades
Dra. Mónica García
Epidemióloga/Epigenética/Conferencista/Autora